No hay ningún sistema de salud mundial que esté preparado para cubrir las cadenas de frio que necesitan dos de las vacunas que actualmente están en fase 3
Según explicaron autoridades sanitarias, dos de las diez vacunas que en este momento están en fase 3 de ensayos clínicos, utilizan la novedosa tecnología de usar el material genético del virus, por lo que no hay ninguna otra vacuna utilizada en el mundo que tenga estas mismas características.
Las autoridades manifestaron que no hay ningún sistema de salud en América Latina, Estados Unidos y Europa que estén listos para manejar estas vacunas, porque para ello se necesita tener un almacenamiento que este a menos 70 grados centígrados o menos 94 Fahrenheit, para las otras 8 vacunas que se encuentran en fase 3, si se pueden manejar en las cadenas de frío que se encuentran en cualquier país.
La Organización Panamericana de la Salud está hablando con instituciones financieras para fortalecer las cadenas de frío de los países ya que cualquier nación del mundo que quiera usar la vacuna va a necesitar cambios o conseguir nuevos almacenes para conservarla a esa baja temperatura. Aunque aclaran que cuando la vacuna llegue a los centros de vacunación no será necesario conservarlas a esa baja temperatura, ya que se puede almacenar durante cinco días a unos 2 a 8 grados centígrados, o unos 35 a 46 grados Fahrenheit.
El problema va a encontrarse en los almacenes centrales y en el transporte y ahí deberán de realizar una inversión, con lo que esto significaría un desafío para todo el mundo ya que por primera vez se tendrán vacunas con estas características disponibles.
También se indicó que la farmacéutica Pfizer está alcanzando acuerdos bilaterales con varios países, entre ellos los latinoamericanos, como Argentina, Chile, México, Ecuador y que sigue negociando con Perú y Brasil.
Las autoridades recordaron que desde el inicio de la pandemia, casi 22 millones de personas han sido infectadas con COVID-19 en nuestra región, y más de 660,000 han muerto como resultado del virus.
La subida de casos se ha visto en América del Norte, en la mayoría de los estados de Estados Unidos, partes de Canadá y algunos estados de México que están sufriendo picos de contagios.
En el Caribe se destaca que, gracias a la vigilancia efectiva de la enfermedad, países como Las Bahamas adoptaron medidas rápidas de control, como el rastreo de contactos, por lo cual evitaron el descontrol de los picos reportados durante las últimas semanas
En Sudamérica, Chile, Paraguay y Uruguay han mantenido la transmisión bajo control y han aplanado sus curvas epidemiológicas. Y los casos en Argentina, que experimentaron un pico de transmisión en Septiembre y Octubre, están disminuyendo gracias a una mejor coordinación entre las provincias de ese país.