La Coalición Americana de Empresas Pro-Inmigración (ABIC) realizó una breve declaración sobre la elección de Joe Biden como presidente electo de Estados Unidos.
En la declaración emitida por ABIC se indica que el ex vicepresidente Joe Biden se convertirá en el próximo presidente de Estados Unidos y que se contará con mayorías partidistas más pequeñas en el Senado y la Cámara de Representantes. “Estos resultados muestran que la mayoría de los estadounidenses quiere sentido común, soluciones bipartidistas, no división y habilidad para el juego”, dice la declaración.
“Una de las primeras prioridades que se debe de abordar es la reforma migratoria. Casi 8 de cada 10 estadounidenses creen que la inmigración es buena para nuestro país y el 81% de los estadounidenses apoyan proporcionar un camino hacia la legalización para los inmigrantes indocumentados. Los estadounidenses saben que los inmigrantes son esenciales para el tejido económico de nuestra nación; su habilidad y ética de trabajo hacen que Estados Unidos sea competitivo y próspero a nivel mundial”, agrega el comunicado.
En 2020, los inmigrantes representaron el 27.6% de los trabajadores agrícolas y el 16.5% de los trabajadores de la salud, sectores críticos para apoyar nuestra economía durante la pandemia de COVID-19 y ayudarla a recuperarse y volver a crecer más fuerte. Y los inmigrantes también ayudan a crear empleos. Un extraordinario 45% de las empresas de Fortune 500 fueron fundadas por inmigrantes o sus hijos.
También puntualiza ABIC que, si el país va a recuperarse completamente de la peor crisis económica y de salud pública en décadas y si se desea crear y cubrir suficientes puestos de trabajo para mantener el ritmo del nivel de vida actual, los líderes de la nación deben priorizar la reforma migratoria.
ABIC concluye su mensaje señalando que, “como coalición de líderes empresariales, creemos que el presidente electo Biden debería trabajar con el Congreso en sus primeros 100 días para aprobar una reforma migratoria integral, comenzando con protecciones permanentes para los Dreamers, inmigrantes con TPS y sus familias. Es hora de dejar de lado la retórica divisiva y volver a los fundamentos que han impulsado el progreso y la prosperidad estadounidenses durante más de un siglo. Eso comienza recordando que los inmigrantes nos hacen fuertes”.